Escudriñando en la historia del Atletismo Cubano acabo de descubrir un nuevo récord nacional de Decatlón, que no había sido documentado hasta hoy. Ocurrió hace más de 20 años, justamente el 4 de febrero de 1990, en la ciudad de Santiago de Cuba.

Se celebraba el torneo “Aurelio Janet”, en memoria del jabalinista cubano que en 1968 lanzó el dardo a más de 80 metros durante los Juegos Olímpicos de Ciudad de México.

Durante los años 90, llegó a ser “el Janet” la principal reunión de combinadas del país, pues allí casi todos los atletas conseguían sus mejores registros de la temporada. Y 1990 no fue la excepción.

Por entonces el record nacional cubano pertenecía a Rigoberto Salazar quien logró, en 1979, 7881 unidades. Al ser calculado usando las tablas de 1985, el registro quedó en 7749. Ese era el tope a vencer.

Se alistaron los mejores Decatletas cubanos de entonces: los consagrados Ernesto Betancourt y Luis Eroides Milanés; el prometedor Juan Miguel Gómez y los más jóvenes Miguel Valle y Eugenio Balanqué.

Los cinco tenían opciones reales de superar el registro nacional de Salazar. Pero los tres más fuertes parecían ser Milanés, Valle y Betancourt, en ese orden. Betancourt salía de un 1989 en que no pudo competir por lesiones y Valle quería dar el salto definitivo a la categoría de mayores, pues atesoraba ya el record nacional juvenil. Balanqué estaba tan sólo en su segundo Decatlón y se vislumbraba el potencial que desarrollaría años después. Gómez por su parte era muy fuerte en los dos eventos finales, la Jabalina y el 1500 (sobre todo en este, donde había llegado a registrar 4:11.0, una marca de nivel mundial entre Decatletas).

Reviviendo la contienda

Valle mostró su poderío y sus “malas intenciones” desde el inicio y con 10.70 (marca personal, PB) ganó los 100 metros, para encabezar temprano la contienda. Luego de tres pruebas seguía delante, gracias a 7.18 en Longitud y buena bala de 14.60 (PB). Su total de 2551 era mejor en 86 unidades al de Betancourt (2467; 10.93, 6.96, 14.95); en 100 exactos a Milanés (2451; 11.06, 7.36, 13.61) y en 107 a Balanqué (2444; 11.06, 6.96, 15.06 PB). Ya estaba planteada la férrea batalla por el primer lugar.

El Salto de altura, el cuarto evento en disputa, sacó de carrera a Valle que solamente pudo empinarse hasta 1.76. Su pequeña estatura esta vez le jugó una mala pasada. Tras la altura Balanqué (que de juvenil practicó este evento) pasó a comandar la competencia. Saltó 2.06, que le permitieron separarse 5 puntos del segundo ubicado, Betancourt (2.03), 3303 por 3298. Cada vez la contienda estaba más apretada. Tercero marchaba Milanés con 3254.

Los 400 metros planos representaron una de las pruebas de más calidad en el primer día de competencias. Cuatro hombres bajaron de 49 y ocho lo hicieron en menos de 50 segundos.

La disputa por los puestos de vanguardia se cerró aún más. Al descanso luego del primer día, Betancourt encabezaba la batalla, cinco unidades por encima de Balanqué, 4146 por 4141. Pero Milanés, con el mejor registro de los tres en 400m, 48.96, acortó diferencias y mantuvo el tercer puesto con 4117. Cuarto más alejado marchaba Valle, con 3978, mientras quinto y sin opciones a titularse se ubicaba Gómez, 3823.

Miguel Valle ganó el primer evento del segundo día, los 110m con vallas con 14.67 y logró acercarse a los tres punteros, que nuevamente intercambiaron sus posiciones. Al tope retornó Balanqué gracias a su tiempo de 15.08. Esta vez su ventaja sobre el segundo, que pasó a ser Milanés (14.96), era de 10 unidades, 4981 por 4971, mientras Betancourt, más flojo en el evento de los obstáculos (15.54), se ubicaba tercero con 4933; Valle marchaba cuarto más cerca, 4868, mientras Gómez continuaba quinto y alejado de la punta, con 4664.

El séptimo evento, el Lanzamiento del disco, trajo una nueva reorganización entre los punteros. Betancourt retomó el liderazgo, gracias a su esfuerzo de 46.80, su mejor registro personal. Su total llegó a 5737 unidades, mejor que Balanqué quien mantuvo el segundo con 5699. Tercero marchaba Milanés con 5640 mientras que Valle volvió a alejarse tras un mediocre 37.60m. Su total quedó en 5484, muy cerca de Gómez quien llevó el disco hasta 43.90 (PB, el segundo mejor) y subió su puntaje hasta 5408.

El Salto con pértiga fue el evento que definió la competencia. Al menos luego de esta prueba quedó claro que únicamente dos atletas seguían en carrera por el récord cubano: Ernesto Betancourt y Luis Eroides Milanés. De los cinco punteros quedó fuera, definitivamente, Miguel Valle, quien se fue en blanco en la pértiga y vio así esfumadas sus esperanzas de un récord nacional de Cuba en la categoría de mayores. Por su parte Gómez y Balanqué tuvieron un pobre desempeño y se alejaron demasiado de la cúspide.

El ganador del salto con pértiga fue Milanés con 4.50 (marca personal). Y esto lo llevó, por primera vez, al tope de los puntos tras ocho pruebas disputadas. A falta de dos eventos totalizaba 6400 unidades, 46 más que Betancourt, quien saltó 4.00 y llegó hasta 6354. Tercero seguía Balanqué con 6156 (solamente saltó 3.40) mientras Gómez (3.60) no llegaba a los 6000, con 5917. Demasiada distancia, pese a su mejor final.

El Lanzamiento de la jabalina prácticamente decidió quién ganaría la contienda. Ernesto Betancourt parecía inalcanzable en la cúspide, pues aventajaba a Luis Eroides Milanés por 127 puntos a falta del 1500 (7179 vs. 7052). Una mejoría de Betancourt en su registro personal, que ahora situó en 65.80m, le permitió separarse de su rival, que no pasó de 54.30m. Otro que mejoró, y mucho, fue Juan Miguel Gómez. Ganó la Jabalina con 66.70, nuevo tope personal, y aunque se mantuvo en cuarto puesto, prácticamente aseguró terminar tercero, pues para Balanqué (sólo 55.00m en Jabalina) sería muy difícil mantener la ventaja de 63 puntos (6819 vs. 6756) debido al gran 1500 de Gómez.

Precisamente en el décimo evento llegó el hecho curioso, que generó esta historia. Llegaban al último evento dos atletas con opciones de mejorar el récord nacional vigente para el Decatlón, en poder de Rigoberto Salazar, desde 1979, con 7749 puntos. En mejor posición se encontraba Ernesto Betancourt quien solamente necesitaría correr la distancia de 1500 metros en 4:58.13 (ó menos) para dejar atrás el récord. Milanés por su parte debería terminar la agotadora prueba (sobre todo después de otras 9 en dos días) antes de 4:37.28.

Para ellos podría ser muy beneficioso contar con Juan Miguel Gómez, un gran corredor de 1500, con registro personal de 4:11.0. Ellos no tendrían que marcar el paso… eso se lo dejaban a Gómez. Tan sólo tendrían que chequear los parciales para saber que estaban dentro de los límites de mejoría del record.

¿Qué pasó en el 1500?

Por supuesto que Gómez ganó fácilmente la prueba de 1500 metros. Su registro de 4:14.11 le permitió escalar al tercer lugar y lograr su tope personal en Decatlón con 7608 puntos.

Lo que ocurrió después escapó a la suspicacia de todos los que de una manera u otra seguían  la competencia. Para hacer justicia es que escribo este artículo, pues en la Cronología del récord nacional cubano de Decatlón nunca ha aparecido Luis Eroides Milanés con el registro de 7823 puntos.

Resulta que Milanés terminó segundo el 1500 con 4:26.07 y su total de 7823 constituyó nuevo record nacional. Claro que solamente duró 13 segundos, pues luego de ese lapso, que fue cuando llegó a la meta Ernesto Betancourt (4:39.07), el récord de Milanés fue también superado.

En las estadísticas quedó plasmado que, el 4 de febrero de 1990, Ernesto Betancourt implantó nuevo récord de Cuba en Decatlón con 7865 pero nadie reparó en que, 13 segundos antes, Luis Eroides Milanés también entró en los libros de records. Si miramos la Cronología del Récord Cubano de Decatlón, veremos, desde hoy, lo siguiente:

7 749          Rigoberto Salazar                      54            La Habana                          25 May 1979

                  10.9 - 7.38 - 15.03 - 1.95 - 50.1 // 14.3 - 44.28 - 4.00 - 60.88 - 4:47.5

7 823          Luis Eroides Milanés                 63            Santiago de Cuba               04 Feb 1990

                  11.06 - 7.36 - 13.61 - 2.00 - 48.96 // 14.96 - 40.24 - 4.50 - 54.30 - 4:26.07

7 865          Ernesto Betancourt                    63            Santiago de Cuba               04 Feb 1990

                  10.93 - 6.96 - 14.95 - 2.03 - 49.29 // 15.53 - 46.80 - 4.00 - 65.80 - 4:39.07

Espero que este trabajo sirva para mostrar, 20 años después, lo que pasó en la pista de rekortán del complejo deportivo de Santiago de Cuba. Ojalá que Milanés pueda leer estas líneas y quede satisfecho con esta aclaración. La labor de historiadores y estadísticos deportivos es mostrar la verdad… donde quiera que se esconda.

“La batalla de Santiago” fue tan apretada que 4 hombres tuvieron la punta, en algún momento de la competencia: Valle hasta la tercera prueba; Balanqué tras la cuarta y la sexta; Betancourt luego del primer día y tras la séptima, la novena y la décima y Milanés después de la octava. También marcó el despegue definitivo del Decatlón en Cuba, pues a partir de este año, 1990, este evento comenzó a crecer en el país, al punto de que hoy día se han ganado medallas en Juegos Olímpicos y en Campeonatos Mundiales de todas las categorías.

Como para resarcir en algo el olvido o la omisión, Luis Eroides Milanés se encargó, un mes y días después, en el Pedro Marrero de La Habana, de superar el récord de Betancourt. Esa vez venció a su rival, 7884 por 7858 y quedó con la primacía cubana.